¿Recuerdas cuando en nuestra infancia hacíamos guerra con bombas o globos llenos de aguas? Aun de adulto se juega mucho. Me viene a la memoria el verano pasado cuando fuimos a casa de unas amistades con mis sobrinos porque todos íbamos a jugar a guerras con los globos llenos de agua. No se podían llenar mucho ya que se explotaban con facilidad. Los tomábamos con cuidado para poder lanzarlos sin que explotaran en nuestras manos.
Así pasa con nuestra mente. Hay un dicho que usamos mucho ¡Mi cabeza me va a estallar! Eso ocurre cuando recibimos mucha presión en el lugar de trabajo, cuando estamos preocupados por alguna situación que estamos pasando. Comenzamos a meditar y a pensar tanto en cómo se puede solucionar y sobrecargamos la mente y el cerebro. Es tanta la presión que nos puede dar migraña, un derrame cerebral, o caemos en una depresión profunda.
Para el año 2005 me encontraba cómo el globo lleno de agua—frágil, saturado de situaciones difíciles y apunto de explotar. Llevaba dos años de casados y vivía rentando en un apartamento. Mi esposa estaba empezando un nuevo trabajo y yo, con lo poco que ganaba, llevaba el sustento de mi hogar.
Un día mi condición de salud (LES) despertó, los dolores eran fuertes y mucho más cuando comencé a expulsar piedras de los riñones. Ese día mientras Mónica trabajaba, mi madre me tuvo que llevar de emergencia al médico. El doctor sin titubear le dijo a mi madre que me tenían que operar. Ya se podrán imaginar el dolor físico y mental que tenía. Cuando mi esposa llegó al hospital asustada, ya yo estaba en sala de operaciones.
La operación fue un éxito, sin embargo al otro día comencé con unos dolores fuertes de cabeza. Mis médicos tuvieron que buscar a un neurólogo ya que el dolor no me dejaba levantarme de la cama. Fueron dos meses sin trabajar, sin recibir dinero. Mi mente no aguanto más y me dio un pequeño derrame cerebral. En otras palabras mi mente explotó como un globo lleno de agua.
Fue en ese momento que entendí lo que dice la biblia:
Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros (1 Pedro 5:7)
Hoy quiero decirte que no hay truco, ni magia, ni mucho menos los 5 pasos para tener la mente clara.
Es algo muy simple.
Dice la biblia:
“Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?” (Mateo 6:25)
No permitas que tu mente se llene de pensamientos negativos.
“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad.”(Filipenses 4:8)
Llena tu mente de cosas maravillosas. Cuando lo hagas te aseguro que vas a Volver a Nacer