La esencia de Dios es amor. El se relaciona en amor. El ama y quiere ser amado. El expresa amor y a través de la Biblia vemos cómo El declara su amor.
Dios envió a su hijo amado como una demostración de su amor para nosotros. En el bautismo de Jesús, Dios declaró: “Este es mi Hijo muy amado, quien me da gran gozo» (Mateo 3:17).
Jesús era amado por el padre y ese amor por el Padre lo hacia vivir en confianza y en obediencia ante Él. Ese amor vino del Padre a Jesús, y de Jesús, a nosotros. Dios envolvió ese amor en carne y lo entregó a nosotros como un regalo a través de la humanidad y la persona de Jesús.
Jesús vivia convencido de ese amor y tambien declaró su amor hacia nosotros. El dijo: “Asà como el Padre me ama a mÃ, también yo los amo a ustedes. Nunca dejen de amarme.” (Juan 15:9).
El amor esta ahà para ti.
El amor del Padre Celestial que vino en la primera Navidad, es todo lo que necesitas para sobrellevar todo en esta vida. Hasta que Jesús vuelva y estemos siempre con Él, tienes su amor través de su Santo EspÃritu.
En ese amor espera; en ese amor confÃa.
Solo en ese amor puedes vivir seguro. No confiamos en carros, ni en caballos—como dice Salmos 20:7—sino en su amor.
“Nosotros sabemos cuánto nos ama Dios y hemos puesto nuestra confianza en su amor.” (1 Juan 4:16).
Y mientras vivimos en ese amor y vamos conociendo cada vez mas la inmensa profundidad y la perfección del amor de Dios (Efes. 3:18), nuestro amor tambien se va perfeccionando.
“y al vivir en Dios, nuestro amor crece hasta hacerse perfecto.” (1 Juan 4:17).
Ante la ausencia de amor en este mundo o a tu alrededor, no cedas al desamor, no cedas a todas esas falsedades que alegan ser amor—pero no lo son. Elige vivir en el amor de tu Padre, porque ERES una persona muy amada. Afina tu vida y tu corazón al amor, recordando que no hay nada, ni nadie que pueda separarte de ese amor.
Asà que mientras celebras otra navidad, procura que cada año tu capacidad de amar crezca y tu amor sea aun mas perfeccionado, porque ese es el propósito de la navidad. De igual manera, al esperar otra navidad, anhelemos el dia en que Jesús regresará y lo perfecto será completado.
 “mas cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará” (1 Cor. 13:10).
Lo que es en parte se acabará.
Lo que es a medias se acabará.
Ya no habra grises, ni negros—solo blancos.
Lo impuro será expuesto y lo borroso será revelado.
Ese será el dÃa en que nuestro Señor regresa y viviremos en ese amor pleno y perfecto por siempre.
Mientras tanto, recuerda las palabras de Jesús: “Nunca dejen de amarme.” (Juan 15:9)