He estado pensando: ¿cuántas personas hay alrededor del mundo, siendo inquietadas a desarrollarse, a hacer algo para Dios o comenzar algún proyecto y sin embargo el miedo y la duda los paraliza?
En mi vida he tenido la oportunidad de emprender tanto en lo personal como en lo ministerial. Ante mis deseos de comenzar algún proyecto, he enfrentado diversos retos incluyendo necesidad de tiempo y recursos, subestimación y falta de apoyo. Cualquiera de estos fácilmente podrÃa desalentarte, pero no será asà si decides creer en Dios y en lo que ha puesto en tu corazón.
Cada nuevo proyecto lo he traÃdo a los pies de Señor, rindiéndole todo y creyendo en Él, decidida a abandonar mis proyecciones si en algún momento entiendo que no es el momento o la voluntad de Dios. Me he dado cuenta que el miedo y la duda vendrán inevitablemente. Pero, necesitas entender que si debes desistir de tus planes no debe ser por miedo o duda pues el enemigo puede usar esto para intentar detenerte. Queda de ti, rechazarlo y continuar buscando la dirección de Dios para que se cumplan.
Si queremos tener exito, no podemos tener miedo al fracaso, mas bien debemos estar dispuestos a enfrantarlo con tal de haberlo intentado. El fracaso es un riesgo que tienes que estar dispuesto a correr si quieres emprender cosas nuevas en tu vida.
Cómo puedo rechazar el miedo y la duda:
1.Mantener la oración rindiendo todo a El
2. Confiar en la voluntad de Dios
3. Creer en la provisión de Dios
4. Seguir la Dirección
La mies es mucha, los obreros son pocos. Hoy dÃa, no me cabe duda, que Dios esta llamando y tiene gente que quiere levantar en estos tiempos no solo ministerialmente sino también en lo personal. El desarrollo de nuestra área personal es un puente para colaborar con el Reino. Dios esta interesado en bendecirnos para que hagamos la diferencia y podamos contribuir a propósitos eternos aún desde nuestros éxitos personales. Rechaza la duda y el miedo y simplemente trae todo ante El, confiando en tu Padre.