“Al probar Jesús el vinagre, dijo:—Todo se ha cumplido. Luego inclinó la cabeza y entregó el espíritu.” (Juan 19:30)

En el día de la pascua, recordamos la muerte y el sacrificio que hizo Jesús de morir por nuestros pecados y hacernos libre. Siendo Dios, se hizo carne, vino a vivir entre nosotros, con el propósito de pagar el precio del pecado, por nosotros. Nos estremece pensar en todo lo que Jesús sufrió— la traición, la injusticia, el desprecio, la persecución y el maltrato. Todo lo llevo a su muerte pero su muerte ya estaba en el plan de redención eterna.

¿Pudo haber muerto de otra manera? Creo que sí. También creo que hubo propósito en que el experimentara el quebranto y lo que nosotros también podemos experimentar en el mundo como consecuencia del mismo pecado (Isaías 53:3-10).

Tu dolor, tu sufrir, tu angustia, tu pesar—Cristo lo llevó todo consigo mismo en la cruz del calvario. Pero, no se queda ahí. El momento en que su cuerpo crucificado, abatido y golpeado no pudo más, justo antes de expirar dijo:

Todo se ha cumplido.”

El momento en que Cristo entregó su espíritu fue el preciso momento donde decenas de promesas que fueron dichas y escritas fueran cumplidas. ¿Qué se cumplió?

Todo.

Absolutamente todo lo que estaba dentro del plan de Dios para la humanidad, para ti y para mi, todo cobra su cumplimiento en el sacrificio de Cristo. Por eso, en este día quiero animarte a mediar en estas palabras de nuestro señor justo antes de morir: “Todo se ha cumplido.”

¿Qué es lo que aguardas?

¿Qué es lo que sufres?

¿Qué es lo que esperas?

Te invito a recordar que “Todo se ha cumplido.”

No nos intimidemos por los grandes retos de los tiempos. No nos desalentemos por las angustias que se nos presentan. Afirmémonos, en que el plan de Dios todavía está en efecto, sin embargo ya todo está cumplido. Sus promesas se hicieron Sí y Amén en él. (2 Corintios 1:20). Te invito a que vivas recordando su sacrificio y la gran declaración que hizo: “Todo está cumplido.”

¿Qué piensas cuando se menciona la gloria de Dios? ¿Cuales son esos momentos de gloria que has vivido? Te invito a compartirlos con nosotros en nuestro LIVE de esta noche de viernes santo, mientras exponemos un mensaje sobre la Esperanza de Gloria en Cristo.


Jenilee Rebarber

Jenilee Rebarber es la fundadora de The Altar Place. Jenilee es nativa de Puerto Rico, y vive en el estado de Florida en EU con su hijo Adrián. Es doctora en optometría, empresaria y estudiante del seminario de Liderazgo Ministerial de la Universidad Southeastern. A través de cada temporada y rol, Jenilee ha permitido que cada área de su vida la lleve más cerca de Jesús y le gusta poner eso en palabras. Sus escritos se han publicado en WomenLeaders.com de Christianity Today, en el blog Boundless de Focus on the Family, en la Revista La Fuente y ha sido miembro del entrenamiento de escritores Compel. Para contacto e invitaciones puedes escribirle a: jenilee@thealtarplace.com