Antes de montarnos en un avión tenemos que pasar por la TSA o la agencia de seguridad en el aeropuerto. Ellos tienen unas máquinas de rayos-x que ayudan a revisar si alguien lleva algo que pueda ser peligroso o ilegal en el avión.
Cuando me implantaron un “heart monitor” (Monitor de Eventos) los médicos me dieron unas tarjetas que indicaban el tipo de implante que llevaba y donde estaba colocado. Los médicos me explicaron que en cualquier lugar que tuviese detectores de metales o en los aeropuertos, tenía que mostrar las tarjetas.
La primera vez que iba a viajar cuando llevaba el implante pude ver como este proceso era muy riguroso. Creo que esto era necesario por dos razones. Numero uno, necesitaban confirmar que la información era correcta y segundo, necesitaban asegurar por cual máquina de rayos-x podían pasarme para que no me haciera daño a mi o a el implante.
Ellos me trataron súper bien y cuando pasé por la maquina correcta, pudieron ver el implante. Fue muy interesante porqué nada podia ser oculto sin que ellos lo vieran.

Así mismo pasa cuando queremos ocultar nuestros sentimientos, nuestros miedos, nuestras culpas, en fin, todo aquello que nos impide seguir adelante y ser victorioso.

Jesús dijo: “Así que no los temáis, porque nada hay encubierto que no haya de ser descubierto; ni oculto que no haya de saberse.”
Mateo 10:26

En una ocasión, mi gran amigo y yo íbamos al cine los jueves de estreno como de costumbre. El me notó rezagado, triste y pensativo. Él no sabía que yo había recaído de mi condición y tampoco sabía de las decisiones que mi esposa y yo teníamos que tomar. Pero de pronto, el riéndose mientras guiaba, me dijo:
“Josue «Estad quietos y conoced que yo soy Dios; seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.» Salmo 46:10”
Eso fue como un balde de agua fría que cayo sobre mí. Yo reía y a la vez lloraba porque sabía que por más que intente ocultar mis sentimientos, Dios podia verlos y me dejo saber, por medio de mi amigo, que podia tener paz y que él iba a intervenir. Desde ese día aprendí y entendí que es bueno pasar por los rayos-x espirituales. Antes de tomar una decisión, si estoy turbado o siento que algo me detiene, le digo a Dios lo que el salmista dijo:

“Examíname, Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos.”
Salmo 139:23

En medio de cada situación, decisión o sentimiento, deja que Dios te examine como solo el puede hacerlo y verás que puedes Volver a Nacer.

Josue Rivera es el autor del libro Volver a Nacer. En su libro, Josue narra cómo su fe ha hecho la diferencia para vivir y sobrellevar la condición Lupus Sistémica. Síguelo en: su página de facebook y puedes Adquirir su libro en este link.


Josue Rivera

Josue Rivera es el autor del libro Volver a Nacer. En su libro, Josue narra como su fe ha hecho la diferencia para vivir y sobrellevar la condición Lupus Sistémica. Josue se ha destacado en varias funciones de liderazgo en la iglesia, inculyendo el ser miembro de la junta general. Josue vive en Puerto Rico con su esposa Monica, y se desenvuelve cómo exponente de la palabra, dando charlas en diversos lugares y colaborando en la iglesia.